Hoy tenía ganas de comida con sabor a casa. Una de esas comida que estando "en el exilio" traen tantos recuerdos y que saben a gloria. Así que dicho y hecho: a sacar la morcilla del congelador y el bote de pimientos del piquillo, y manos a la obra.
INGREDIENTES
- 1 morcilla de Burgos
- 6 huevos
- 2 patatas medianas
- 150 g de pimientos del piquillo en tiras
- 2 dientes de ajo
- Aceite de oliva
- Aceite de girasol
PREPARACIÓN
1º Pelamos, cortamos y freímos las patatas como si fuesen para una tortilla. Cuando estén casi hechas las sacamos de la sartén.
2º En otra sartén echamos un chorro de aceite oliva y doramos los ajos cortados en láminas. A continuación añadimos los pimientos y los salteamos.
3º Después añadimos la morcilla desmigada y damos unas vueltas.
4º Enseguida añadimos también las patatas y los huevos batidos. Removemos el conjunto y cuando el huevo esté ya cuajado retiramos del fuego y servimos.
Acompañado de una ensalada de lechuga, tomate y cebolla, cena redonda.
¡Plato contundente y nutritivo!. Supongo que lo acompañarías con un tinto de mucho cuerpo.
ResponderEliminarUna sugerencia: Procura revisar el enlace a tu perfil. Cuando haces un comentario en otro blog, no se puede acceder al perfil.
El tinto no falló ;)
ResponderEliminar¡Gracias por el consejo! La verdad es que todavía ando un poco pez con esto del blog, pero creo que ya lo he arreglado.
Mira que me gusta la morcilla de arroz, me has tocado uno de mis muchos platos preferidos jajaja. No me había hecho seguidora tuya porque no sabía tu enlace, ahora que me has comentado si que he podido acceder a tu blog. Encantada de conocerte. Un besazo.
ResponderEliminarOy con lo que me gusta a mí la morcillita... qué buena receta para comer con un buen trozo de pan
ResponderEliminarUn saludo!