domingo, 25 de abril de 2010

TZATZIKI

El año pasado en una barbacoa, un amigo griego me enseñó esta receta tan típica en su país. Es muy sencilla y rápida, y perfecta para acompañar barbacoas o un picoteo. Yo la preparo desde entonces muy a menudo para comidas con amigos y siempre gusta.

Ingredientes:
  • 600 gramos de yogur griego
  • 1 pepino grande
  • 8 gramos de eneldo fresco
  • 2 dientes de ajo
  • Aceite
  • Vinagre
  • Sal
  • Pimienta
Primero se pela y se ralla el pepino, se le echa un poco de sal para que suelte el agua y se deja escurrir el máximo tiempo posible. Con una hora es suficiente, pero si se deja más tiempo, soltará más agua y el tzatziki quedará más consistente (como el auténtico tzatziki griego).

A continuación, picamos el eneldo y el ajo muy finitos y los mezclamos con el yogur y el pepino, echamos un chorrito de aceite y otro vinagre y salpimentamos. Guardamos en la nevera hasta ser consumido.



Lo bueno que tiene el tzatziki es que se conserva muy bien durante días. De hecho, yo suelo prepararlo como mínimo un día antes de consumirlo, ya que el pepino sigue soltando un poco de agua, que se queda en la superficie y se puede retirar fácilmente, quedando el tzatziki más consistente y sabroso.

lunes, 12 de abril de 2010

VERDINAS CON ALMEJAS

Hace un par de semanas me animé a hacer las verdinas asturianas que teníamos en la despensa, y a falta de los ingredientes para la receta que me habían recomendado, me decidí por ésta, que es más sencilla.

INGREDIENTES

* Verdinas
* Almejas
* Aceite de oliva
* Cebolla
* Ajo
* Vino blanco
* Perejil
* Laurel
* Sal

En primer lugar habrá que dejar las verdinas a remojo como mínimo ocho horas.


Ponemos las verdinas en una cazuela con agua, un chorro de aceite, una hojita de laurel y sal, y que cuezan a fuego vivo durante unos cinco minutos, para poder eliminar la espuma que salga. Después, dejar cocer a fuego lento durante unas dos horas. Una vez hechas, escurrir, reservando parte del agua de cocción.



Mientras se cuecen las verdinas, poner las almejas a remojo con sal, para que suelten la arena que puedan tener.

A continuación, en una cazuela baja poner a pochar el ajo y la cebolla picados finos. Cuando estén tiernos añadir perejil y un vasito de vino blanco, y cuando éste empiece a hervir, las almejas, que se irán abriendo en unos cinco minutos.


Finalmente, incorporar las verdinas con parte de su caldo y dejar cocer todo junto durante unos quince minutos para que se mezclen los sabores.

sábado, 10 de abril de 2010

COCINA ETÍOPE EN EL SUNSHINE (Utrecht)

EL RESTAURANTE
Una de las cosas que me gustan de Utrecht es la variedad de restaurantes que hay: desde italianos a japoneses, pasando por españoles, balcánicos o indios. Ayer nos decidimos a probar algo nuevo: el Restaurante Etíope Sunshine.

LA COMIDA

La carta se compone básicamente de platos de carne y vegetarianos, que pueden ser individuales, aunque lo habitual es servirlo todo en una gran bandeja de la que comen todos los comensales. Como no sabíamos muy bien que pedir, el camarero nos recomendó un menú degustación, que consistía en pequeñas porciones de los siguientes platos:

  • Doro wot: muslos de pollo servidos con huevo duro y una salsa picante de cebolla y guindillas.
  • Tebs y kitfo: trocitos de cordero y ternera con una mantequilla especial etíope y pimienta.
  • Yetitmatim Ferrer: trocitos de tomate, pimiento verde y garbanzo molido y especiado.
  • Ye Asa Wot: atún.
  • Aib: una especie de queso fresco desmigado.
  • Col y Ensalada de lechuga y tomate.
Toda esta comida se dispone sobre enjeras en una gran bandeja redonda. Enjera es el “pan” etíope, unas tortas grandes y finas, lisas por un lado y con poros por el otro. Está hecho con un cereal local, el tef, agua y sal.
Y ahora viene lo más curioso del asunto: la forma de comer. Coges un trozo de enjera con los dedos y con él un trozo de comida. Los dedos deben tocar la parte lisa de la torta, mientras que la parte de poros va a la comida, para impregnarse bien de la salsa.


LA BEBIDA
Para beber probamos primero la cerveza St Georges en Bati, suave, bastante normalita. También hay cervezas angoleñas de coco, mango o plátano.
Después pasamos al vino de miel casero, hecho con miel y lúpulo, y servido en una especie de matraz. La verdad es que entraba muy bien con la comida picante.


En resumen, una experiencia culinaria diferente, la comida deliciosa, el servicio atento, amigable y rápido, y nada caro. Todo un acierto.

Dirección: Pauwstraat 11, Utrecht