Llegas a casa tarde, has estado super liado todo el día y aún te queda por hacer un millón de cosas más en casa. No tienes tiempo de cocinar grandes florituras y aún menos de ir al super a por ingredientes, así que hay que tirar de nevera y despensa. ¿A alguien le suena familiar esta situación?
La receta de hoy es perfecta para esos días. Es super fácil, se hace en un pispás y seguro que tienes todos los ingredientes a mano. Además es sana y está buenísima. Y si no tienes nata no pasa nada, la puedes sustituir por salsa de tomate o un chorrete más grande de aceite de oliva.